La Chía tiene un gran potencial como alimento debido a sus extraordinarios valores nutricionales. No en vano fue uno de los alimentos principales de las civilizaciones azteca y maya. Es la mayor fuente vegetal de ácidos grasos Omega-3, y sus semillas contienen antioxidantes, proteínas, aminoácidos, vitaminas, minerales y fibra. Las semillas de chía son conocidas por ser muy saludables para el organismo. ¡Y también lo son para la piel! Incorpora su consumo a tu dieta diaria y te sorprenderás con los resultados.
¿Qué componentes de las semillas de chía benefician a la piel?
Vitamina E
Las semillas de chía contienen vitamina E, un poderoso antioxidante que combate la inflamación y las arrugas. Esta vitamina ayuda a tener una piel naturalmente suave y delicada. Las semillas de chía tienen un alto contenido de esta vitamina y es fácilmente absorbida por el cuerpo.
Zinc
Las semillas de chía también contienen zinc. El zinc es un mineral muy importante para la salud y con propiedades anti-age. También ayuda a combatir el acné, la inflamación y mantener la piel en buen estado.
Omega-3
Al igual que en el pescado, el Omega-3 también está presente en las semillas de chía, en un contenido incluso mayor que en el salmón. Ayuda a combatir el acné, las arrugas, y mantienen tu piel suave y el cabello radiante al igual que las uñas. Los ácidos grasos Omega-3 regulan las hormonas. Y eso es fundamental para la piel, ya que cada vez que nos estresamos nuestras hormonas se desnivelan y nuestra piel es la primera en verse afectada.
Magnesio
El magnesio es otro gran mineral presente en estas semillas. Y tiene muchos beneficios saludables. Por ejemplo, ayuda a regular el azúcar en la sangre, a que el sistema nervioso actúe adecuadamente; esto permite controlar la ansiedad y los desajustes en los niveles de hormonas desiguales, que pueden afectar la piel.
Potasio
Las semillas de chía son una buena fuente de potasio al igual que el resto de las semillas. El potasio es un nutriente importante para la dieta, ayuda a prevenir la inflamación, hinchazón y el latido irregular del corazón, que puede conducir a una presión arterial alta. También regula los niveles hormonales, evitando que afecten la piel.
Proteínas
Las proteínas en las semillas de chía ayudan a fortalecer el cabello, las uñas y la piel, dejándola más firme. Las proteínas ayudan a mantener el colágeno de la piel, lo que la ayuda mantenerse tersa y joven.
¿Cómo tomarlas?
La semilla de Chía también se puede consumir con leche, leches vegetales, yogurt, ensaladas, frutas, salsas, sopas, cremas, verduras, etc. También se puede incorporar, tanto entera como molida, a panes, galletas, barritas energéticas o repostería. No tienen sabor ni olor por lo que su incorporación no afectará a las recetas. Para aprovechar al máximo sus nutrientes es mejor consumirla molida. Se puede tomar a cualquier hora del día, mejor antes de las comidas. Para notar sus efectos se deben consumir entre 10-20 gramos diarios.