La deforestación es uno de los grandes problemas medioambientales globales. Según la organización ecologista WWF, si no se toman medidas, desde hoy hasta 2050 se perderán 2,3 millones de kilómetros cuadrados de bosque, una superficie superior a la de México. Pero cada vez hay más iniciativas que abogan por un uso sostenible de los bosques, capaz de reducir e incluso revertir esta tendencia. Y cada vez más consumidores tienen en cuenta estas iniciativas a la hora de comprar muebles y suelos de madera y se decantan por productos con madera sostenible.
“En principio cualquier mueble de madera es de origen sostenible por sí mismo, pues de lo contrario no podría estar en el mercado europeo”, apunta Manuel Carrillo, director del Instituto Técnico del Mueble y la Madera (Aidima). En 2013, entró en vigor el Reglamento Europeo de la Madera, que prohíbe la venta de madera “aprovechada ilegalmente” y obliga a los fabricantes y vendedores a ser “debidamente diligentes” para asegurarse de que lo que compran no procede de explotaciones ilegales y sí son productos con madera sostenible. Sin embargo, alerta de que aún falta una adecuada legislación que sancione convenientemente a los que incumplan la ley.
Fuente: El País http://sociedad.elpais.com/sociedad/2014/04/02/actualidad/1396471083_599757.html