Si estas reformando o construyendo una vivienda y tu compromiso con el medioambiente va más allá de comprar “productos verdes”, una buena alternativa es optar por materiales de revestimiento ecológicos. El pavimento de toda tu vivienda, por ejemplo, puede ser totalmente respetuoso con el ambiente. Son los llamados pavimentos ecológicos. Es importante resaltar que, un material ecológico, no debe ser solamente natural y renovable, hay muchas otras características que hacen de un material, ecológico. Es necesario considerar los impactos de este material en el medio ambiente:
Algunos de los factores que debes tener en mente es la capacidad de este material de ser renovado y reciclado. Debes saber también si la fabricación de este material es hecho de forma responsable. De nada valdrá un bonito y “ecológico” suelo de bambú fabricado por una empresa poco ética con el medio ambiente. Debes tener en cuenta también la distancia del transporte de este material ¿es viable encargar un material desde muy lejos? Piensa en la contaminación y emisiones de carbono.
Otros factores importantes que debes tener en cuenta son la toxicidad del producto utilizado para el medio ambiente, su mantenimiento y ciclo de vida.
Algunas opciones de suelo ecológicas:
Suelo de corcho: material natural, renovable, se fabrica a partir de la corteza de alcornoque que crece después de ser cosechado. Proporciona aislamiento del frio y calor, repele naturalmente insectos, moho y ácaros.
Suelos de linóleo: hechos con aceite de linaza que se produce naturalmente a partir de plantas de lino, es un material muy disponible y altamente renovable, su producción no tiene efecto negativo en el ambiente y pueden durar de 25-40 años.
Suelo de bambú: el bambú es una planta de rápido crecimiento, con un ciclo de cosecha de 3-5 años, lo que le hace altamente renovable.
Moquetas ecológicas: cuidado al comprar alfombras y moquetas, muchas de ellas se producen a partir de petróleo, recurso no renovable. Prefiera los productos hechos con materiales naturales como lana o pastos marinos.
Suelos de madera reciclada: se hacen a partir de madera reciclada de otras aplicaciones, lo que evita la poda de un árbol vivo. Hay que tener en cuenta si la madera utilizada no ha sido tratada con productos químicos o tóxicos durante su vida.
Piedra natural: es un producto natural constantemente recreado con los procesos tectónicos, no daña el ambiente. El inconveniente es que es un material pesado, lo que puede suponer un gran impacto ambiental en su transporte.
Fuente: http://www.ecologismo.com