La Boswellia serrata es un árbol caducifolio perteneciente a la familia de las Burseráceas. Es un árbol de talla mediana, que puede alcanzar los 12 metros de altura, y presenta una corteza característica a láminas que se resquebrajan, tras las cuales exuda una gomo-oleo-resina aromática de olor intenso. Los brotes y las hojas son pubescentes. Las hojas son alargadas y ovales, y las flores son bisexuales y se agrupan en racimos. El fruto es una drupa trigonal. El árbol de Boswellia serrata, se encuentra al pie del oeste del Himalaya, en las zonas montañosas secas de la India, y también se encuentra presente al sur de la península.
En muchos lugares forma bosques, constituyendo un suministro abundante de madera, pero además es un árbol enormemente valorado por su gomo-oleo-resina. Cuando tiras de la corteza exuda una oleo-resina gomosa conocida como “salai guggul”, muy valorada por la medicina ayurvédica, también conocida como olíbano o incienso de la india. La gomo-oleo-resina se recoge a finales del mes de Octubre, de los árboles, a los que previamente se les han practicado incisiones transversales en el tronco. Posee un sabor dulce amargo y astringente.
La gomo-oleo-resina de incienso de la India, ha sido utilizada tradicionalmente por la medicina ayurvédica para el tratamiento de las inflamaciones del árbol respiratorio, el intestino y las articulaciones. El estudio de sus fitoquímicos muestra que la gomo-oleo-resina de Boswellia serrata contiene bioactivos como son: monoterpenos, diterpenos y triterpenos, posee una fracción del 16% en aceite esencial, principalmente rico en α -tuyeno y p-cimeno. La goma contiene azúcares como son la D-galactosa, D-xylosa, D-arabinosa, D-manosa y de la resina se han aislado además ácidos triterpénicos, o ácidos boswélicos, responsables de su valor medicinal.
Los ácidos boswélicos y la inflamación articular
Los ácidos boswélicos poseen curiosamente una estructura similar a los antiinflamatorios esteroideos. La tradicional medicina ayurvédica ha utilizado desde siempre la Boswellia serrata, junto a otras plantas medicinales, para tratar la artritis reumatoide. Diferentes estudios han demostrado que los ácidos boswélicos poseen una acción antiinflamatoria e inmunomoduladora, y por ello su uso ha despertado un gran interés para las patologías reumáticas.
Los ácidos boswélicos, han demostrado reducir significativamente la degradación de glicosaminoglicanos, ejerciendo así un efecto protector del cartílago articular. Además el uso de la oleo-resina de Boswelia presenta otras ventajas; no conduce a largo plazo a la irritación o ulceración del estómago. Los efectos antiinflamatorios de Boswellia serrata y sus ácidos boswélicos han sido demostrada in vitro e in vivo. Los ácidos boswélicos poseen propiedades antiinflamatorias muy similares a las de los fármacos antiinflamatorios no esteroideos (AINE), que se utilizan habitualmente para el tratamiento halopático de la inflamación. Los ácidos boswélicos son capaces de inhibir los mediadores proinflamatorios, a través de la inhibición de la 5-LOX (5- -lipoxigenasa), enzima clave involucrada en la síntesis de leucotrienos pro-inflamatorios. Los ácidos boswélicos como hemos anotado poseen propiedades antiinflamatorias y anti-artríticas. Se ha evaluado in vivo, el efecto de Boswellia serrata sobre el metabolismo de los glicosaminoglicanos, y este se comparó con el de ketoprofeno.
En el grupo testado con ketoprofeno, se determinó una disminución significativa de la síntesis de glicosaminoglicanos, mientras que el grupo tratado con Boswellia serrata no había destrucción de glicosaminoglicanos, contribuyendo así a evitar la destrucción del cartílago articular. La oleo-resina de Boswellia serrata se ha utilizado como remedio tradicional en la medicina ayurvédica para el tratamiento de las enfermedades inflamatorias. Si bien nos hemos centrado en su acción en el sistema osteo-articular, las propiedades explicadas se extienden a otras patologías inflamatorias, de hecho el aumento de leucotrienos, formados a través de la vía de la 5-lipooxigenasa, está implicado además en otros estados inflamatorios como la colitis, la colitis ulcerosa y el asma bronquial. Se han estudiado y se encuentra en estudio también los efectos de Boswellia serrata en el asma, ileitis, colitis ulcerosa, colitis crónica, enfermedad de crohn y el cáncer.