Necesitamos alimentarnos en todas las estaciones del año con alimentos que nos refuercen, nutran, y nos aporten la vitalidad que necesitamos a diario, por descontado teniendo en cuenta la estación en que nos encontramos, tanto exteriormente, cómo lo mas importante; interiormente.
Sugerencias prácticas (tanto si nos quedamos en casa o vamos de vacaciones):
TENER LA NEVERA REPLETA de una buena variedad de verduras, ensaladas y frutas.
DISPONER DE UNA DESPENSA PROVISTA de cereales integrales, pasta, proteínas vegetales, legumbres cocidas, semillas, frutos secos, algas, hierbas aromáticas frescas y secas, aceite, condimentos naturales (mostaza….), olivas, endulzantes naturales, leche de cereales o frutos secos (arroz, quinoa, almendras, avellanas…)
PLANEAR EL DÍA ANTERIOR COCINAR CUANDO NO HACE TANTO CALOR.Si esperamos al momento de tener hambre, siempre coincidirá con el calor mas intenso del día. Con lo cual la decisión de comer tan solo ensaladas y frutas es casi instantánea. Si nos organizamos, podemos preparar el día anterior algunos platos: crema fría de verduras, un cereal o pasta para integrarlo en una ensalada, un paté, una quiché de tofu, una macedonia, gelatina o mouse de frutas, hacer ya el aliño o salsa, incluso prelavar las verduras que utilizaremos.…