Infecciones intestinales como enteritis, colitis, enterocolitis, gastroenteritis, etc. Son procesos de inflamación intestinal o lo que en naturopatía se llama catarro agudo intestinal o lo que es lo mismo: inflamación temporal de la mucosa que recubre el intestino. Se denomina Enteritis cuando se inflama el intestino delgado y colitis cuando es el intestino grueso el inflamado.
Cuando está también inflamado el estómago se le llama gastroenteritis, lo que quiere decir toda la mucosa que recubre las paredes del tracto gastrointestinal está afectada. Entre las causas más comunes está el uso de alimentos en malas condiciones, así como la ingesta de comidas o bebidas excesivamente frías o una masticación defectuosa. También deben tenerse en cuenta los excitantes y tóxicos como el alcohol, café, drogas en general y especialmente el tabaco.
También es posible que la inflamación la cause el haber cogido frío a través del vientre o los pies. Mención aparte hay que hacer del estreñimiento que intoxica la mucosa y da lugar a procesos que pueden llegar a ser muy graves. Otros procesos orgánicos que pueden dar lugar a estas inflamaciones pueden estar ligados al hígado, que a su vez, al influir en el intestino delgado da lugar a diarrea, los procesos crónicos de corazón también pueden provocar diarrea y/o estreñimiento, así como los riñones que atascarán el trabajo del intestino grueso.
Las alteraciones en el sistema nervioso pueden dar lugar a diarrea o estreñimiento (todos hemos pasado por ello en algunas ocasiones). En general las intoxicaciones, las indigestiones y el nerviosismo son las causas más frecuentes. Los síntomas pueden variar según el proceso en sí mismo, pero las diarreas y el dolor de vientre suelen ser los más llamativos, así como el estreñimiento. En la Enteritis suele haber falta de apetito y mucosidad mezclada con las heces, en cambio en la colitis el apetito se mantiene y cuando aparecen las mucosidades vía recto no lo hacen mezcladas con los excrementos. Si el recto está afectado, habrá deseos de evacuar frecuentemente y a menudo con dolor. La hinchazón y el dolor de vientre suele ser debido a los gases, lo que llamamos cólico o vulgarmente “retortijón”.
Si se trata de gastroenteritis suelen aparecer vómitos y muy probablemente también fiebre. Aunque cada uno de estos procesos debería tratarse de una forma específica, vamos a dar unos consejos generales para sobrellevarlos. En cualquiera de los casos que hemos mencionado, los mejor es efectuar un ayuno de 24h que puede llegar a 48h si es preciso y tomar algunas infusiones para ayudar a la limpieza intestinal (las semillas de lino, zaragatona y el tomillo ayudan especialmente, así como la menta, anís, manzanilla y malva). La mezcla de manzanilla, malva, tomillo y semillas de lino, es efectiva ingerida o como enema.
1. No enfriarse.
2. No tomar alimentos alterados.
3. Evitar las bebidas frías (o la comida fría).
4. Masticar suficientemente los alimentos antes de tragarlos.
5. Evitar el uso de excitante, alcohol, tabaco…
6. No tomar alimentos en exceso.
7. Mantenerse relajado a la hora de comer sobre todo.
8. No dar demasiadas vueltas al problema.
9. Evitar las discusiones en lo posible.
10. Ayunar y tomar infusiones (puede tomar manzana asada en vez de ayunar).
En el caso del ayuno con infusiones, después puede tomarse caldos vegetales, yogurt, arroz hervido y luego papila, verduras tiernas y frutas dulces maduras, así como huevo pasado por agua.